El detective Germán Areta es un hombre inteligente, sagaz y de principios inconmovibles. Investiga un caso muy complejo que lo lleva a seguir los pasos de un doctor en farmacia que ha abandonado al hombre con el que vivía. De forma inesperada, ambos aparecen muertos; aparentemente, uno de ellos mató al otro y después se suicidó. Pero a Germán esta explicación no le convence, sobre todo después del asesinato de su ayudante.