Este hombre lleva 27 años prófugo de un asesinato que no cometió. No tiene ganas de estar en la cárcel y trata de mantener un perfil bajo tanto como sea posible. Cuando su hija separada es atacada en Londres y la policía falla, Eric jura venganza. Decide localizar a los perpetradores y castigarlos. Debido a que Eric está envejeciendo, les pide ayuda a sus viejos compañeros.